jueves, 17 de mayo de 2012

ALGARABÍA DE RISAS/ Libro de juegos y divertimentos.


Portada del libro

(Lectura de contraportada del libro)

Jolgorio de risas para las y los más chicos


De una maestra de preescolar creativa no se puede esperar que se
quede estática como un arbusto para sombra y embellecimiento
ambiental. Por el contrario se hace niña con las niñas y los niños, en
un permanente corretear por los patios del recreo inventando
juegos, rondas, adivinanzas, retahilas, cuentos de nunca acabar. Y si
además tiene el don del lenguaje metafórico literario, con sus
múltiples figuras e imágenes que devienen en sonidos y sensaciones,
ludismo y comprensión de vida y mundo... de seguro será una
escritora con oficio diario, con una producción sin otro jubileo que el
de ver nacer uno a uno sus libros.

Tal vez este libro Algarabía de risas pueda verse como una
continuación de Tejamos rondas atemos risas (1996), lo que más
bien nos habla del sin fin de su creatividad puesta en escena con los
miles de miles alumnos y alumnas que pasaron por sus manos, dada
su devoción a la docencia de más de treinta años de ejercicio del
magisterio.

En Algarabía de risas, en forma amena y literaria encontramos
rondas, juegos que requieren atención mientras la risa, y las
exageraciones, desbloquean cualquier imposibilidad de decir
seguido los traga-luengas-destraba-lenguas.

MARÍA LUISA LÁZZARO
Mérida-Venezuela






(CONTENIDO DEL LIBRO)
¡¡JUGUEMOS!!

EL ESPADÌN/
 Autora: Inés de cuevas
(Se colocan los dedos –bien separados y haciendo presión-  para que el aludido o aludida, adivine cuántos dedos tiene en la cabeza)
  
Sobre la cabeza de este pequeñín
apunto mis dedos como un espadín

¿Cuántos dedos crees que he apuntado ya?

¡No lo pienses mucho, dime sin fallar!


QUE PARE LA RUEDA

/Autora: Inés de cuevas

 (Girando -en rueda- se cumplen las órdenes que señala el juego. Al decir: “¡Qué dance la abuela!”, una niña saldrá al centro y danzará, mientras los demás giran y,  así sucesivamente)



Qué siga la ronda
Qué pare la rueda
Qué giren los niños
   Qué dance la abuela.


Qué siga la ronda
qué pare la rueda
ya se hizo de noche
enciendan la vela.


Qué siga la rueda
qué pare la ronda
a la rueda rueda
la rueda redonda.


Qué pare la rueda
se acabó la ronda
a dormir, niñitos
que el sueño nos ronda.


EL JUEGO DE LAS PIEDRITAS
/Autora: Inés de cuevas
(Mientras se dan golpecitos en la mano abierta de un participante, se deja caer en ella, cierto número de piedritas o semillas, y estimulamos las opiniones del grupo para que adivinen cuántas piedritas hay encerradas en esa mano).



 En esta mano
vamos a guardar
algunas piedritas
para adivinar.

Cierro bien la mano
con llave y candado
para que adivine
 el más avispado.






A  RONDAR...
/Autora: Inés de cuevas
 (Los participantes van cumpliendo las órdenes que anuncia el juego.  Las frutas pueden reemplazarse por pelotas hechas de papel u otro material)


A rondar nos vamos,  con la rueda rueda
A rondar muchachos,  que ya no hay escuela.

Toma tu naranja,  dame mi parchita
que la rueda rueda,  se puso chiquita.

A rondar nos vamos,  con la rueda rueda
A rondar muchachos,  que ya no hay escuela.

Dame mi guayaba, toma tu limón
que la rueda rueda, ahora es un ruedòn.





COSQUILLITAS

/Autora: Inés de cuevas

(Para hacer cosquillas)
  
Cosquillitas por aquí
Cosquillitas por allá
Si le hacemos cosquillitas
esta niña reirá.


Cosquillitas por aquí
Cosquillitas por allá
Cosquillitas a este niño
Pa´ que ría sin parar.








¿TE DETIENES....?   ¡O TE APARTAS!
/Autora: Inés de cuevas
  (Tomados por la cintura, los participantes hacen un tren que recorrerá -a toda prisa- cualquier espacio abierto,  mientras repiten la letra del juego.  Los nombres se pueden sustituir por los de los niños que participan en la actividad).


Corre, corre; salta, salta
¿Te detienes...?  ¡O te apartas!

Aquí vamos en hilera
los niñitos de la escuela.

Ya llegamos a la clase
que Gustavo pase, pase.

Al tomarnos la merienda
que Orianita hale la cuerda.

Aquí vamos en hilera
los niñitos de la escuela.

Corre, corre; salta, salta
¿Te detienes...?  ¡O te apartas!



PRIMERO ADELANTE, DESPUÉS HACIA ATRÀS
/Autora: Inés de cuevas
 (Para dar saltos. Primero con el pie derecho y luego con el izquierdo)



Primero adelante, después hacia atrás
daremos un salto para comenzar.

Con el pie derecho tú debes saltar
por todo este espacio
¡Anda, empieza ya!

 Primero adelante, después hacia atrás
dando dos saltitos para continuar.

 Ahora el pie izquierdo
¡Anda, salta ya!
sin salir del área
salta sin parar.

 Primero adelante, después hacia atrás
dando tres saltitos, media vuelta y, ya.

 Salta hacia delante
Salta, salta atrás
dando tres saltitos para terminar.





LAS CUENTAS DEL COLLAR
/Autora: Inés de cuevas
 (Para decir la suma total)



Si quieres contar  cuentas de un collar
recuerda las cifras que te voy a dar


¡¡Pon mucho cuidado!!:

Aquí han de pasar
catorce niñitas por la calle Real


Veintidós gandolas también pasarán
por la carretera que va a Cumaná
Cuarenta camiones cargados de sal
y cincuenta niños en auto escolar
  
¿Cuántas cosas -juntas- has visto pasar?


Todo es muy sencillo
 para adivinar
si cuentas las cuentas
 que tiene el collar


Ahora verás lo fácil que está
Uno, dos y seis


¿Será  o  no  será?

¡EXAGERA ... EXAGERA!
/Autora: Inés de cuevas


En mi pueblo había un niño tan avispado, pero tan avispado, que se volvió avispa y ahora vive en un avispero.

Una vez vi una tortuga tan lenta, pero tan lenta, que murió
antes de dar el primer paso.

Conocí una vez a un señor tan bravo, tan bravo, que se volvió toro de lidia y lo indultaron en una feria de pueblo.


Me encontré una vez a una muchacha tan flaca, pero tan flaca...flaquísima, que para verle la cara, tuve que usar lupa.


Había en un lugar una iglesia tan pequeñita, pero tan pequeñita, que para poder entrar los fieles, tenían que sacar a los santos.


Conocí una vez a una señora tan golosa, pero tan golosa,
que cuando pasaba frente a las panaderías, los panes se escondían detrás del mostrador.


Otra vez conocí a un hombre tan alto, pero tan alto, que se la pasaba viendo estrellas.


En una ciudad había un puente tan angosto, tan angosto, tan angosto, que para poder cruzarlo, las personas tenían que caminar de perfil.


Un señor vivía en una casa tan pequeña, pequeñita, pequeñísima, que cuando entraba en ella, la mitad superior del cuerpo quedaba sobre el tejado y los brazos le servían de antena de televisión.


Era un árbol tan alto, pero tan alto, que cuando se desprendía una hoja verde, al llegar al piso ya estaba seca.

Una vez, hace mucho tiempo, conocí a un hombre tan pesado, pero tan pesado, que pasó caminando por un puente de guerra y se doblaron las bases.


Era un hombrecito tan miedoso, pero tan miedoso, que una vez pasó por un charco, y cuando vio las huellas de sus zapatos, creía que alguien lo perseguía y comenzó a correr.


Alguien me contó que una señora se volvió montuna de tanto vivir en el monte; y tan montuna se volvió, que ahora vive encerrada en una tuna.


Hace mucho tiempo, una familia vivía en una casa tan, pero tan, pero tan estrecha, que todos dormían de pie.


Me encontré hace algunos días con un señor que era muy creyente, tan creyente era el señor, que se volvió creyòn y ahora vive en una caja de creyones.


Había en el pueblo un hombrecito tan arrugado, pero tan arrugado, que lo confundían con una ciruela pasa.


Era una cama pequeñísima, pequeñísima; tan pequeña era la cama, que se acostaba un enano y le quedan las piernas colgando.




DON  PREGUNTÓN

/Autora: Inés de cuevas
¿QUÈ COSA...?

 
Trocito de fruta verde
-¿ Quién te muerde?


-El loro de la vecina
cuando viene a la cocina.


Helado de fresa roja
-¿Qué te enoja?


-El niño que hace pucheros
para no tomar tetero.


Azúcar de miel morena
-¿Qué te apena?


-Que Parra murió en la guerra
porque lo mordió la perra.


Tortita de crema blanca
-Qué te espanta?


-El gato de Timotea
cuando salta a la batea.


Chupeta blanquiamarilla
-¿Quién te pilla?


-Los maderos de San Juan
cuando vienen y se van...


Porque no comen queso ni comen pan
sino tortitas de mazapán.
 


 ¡EL COLMO DE LOS COLMOS RIMADOS!
/Autora: Inés de cuevas
 
-¿Cuál es el colmo de una vaca?
-No dar más leche porque está flaca.


-¿Cuál es el colmo de una sardina?
- Entrar al bolso de una traína.


-¿Cuál es el colmo de un tragaluz?
- Comerle al día toda su luz.

- ¿Cuál es el colmo de un alfiler?
- Pincharle el sueño al amanecer.

- ¿Cuál es el colmo de un zapatero?
- Hacer zapatos sin tener cuero.


- ¿Cuál es el colmo de una lombriz?
- No comer tierra sino maíz.


- ¿Cuál es el colmo de una chicharra?
- Acompañarse con la guitarra.

- ¿Cuál es el colmo de un conejo?
- Creerse zanahoria porque está viejo.

- ¿Cuál es el colmo de un aviador?
- A cada nube darle una flor

- ¿Cuál es el colmo de un marinero?
- Tener su barco en un tinajero

- ¿Cuál es el colmo de una campana?
- Tener badajo de ovillo de lana

- ¿Cuál es el colmo de un panadero?
- Hornear los panes en un caldero

- ¿Cuál es el colmo de una gallina?
- Poner un huevo en cada esquina.
 

¿TE LO CONTAMOS
OTRA VEZ...?







EL CUENTO DEL CARPINTERO  
/Autora: Inés de cuevas

  Este era un carpintero que estaba haciendo una mesa,
y lo que iba al revés, él se lo puso al derecho, así que, lo que iba al derecho,
él se lo puso al revés....


¿Quieres que te lo cuente otra vez?
 



EL CASTILLO DE LA COLINA
/Autora: Inés de cuevas

Hace muchísimo tiempo, en una colina había un castillo. Algunos opinaban que el castillo era del Marqués. Otros decían: “ es de la bruja, no es del Marqués”, y desde ese tiempo, aún no se sabe de quién es...


¿Quieres que te lo cuente otra vez?




LA VIEJA Y EL VIEJITO  
/Autora: Inés de cuevas


Una vieja y un viejito vivieron por muchos años en una casa de campo que tenía el techo de nuez y, como no tenían otra casa, allí pasaron su vejez...


¿Quieres que te lo cuente otra vez?



ERAN TRES...  
 /Autora: Inés de cuevas
Eran tres veces, eran dos veces, era una vez...


¿Quieres que te lo cuente otra vez?
 

EL LORO INGLÈS
/Autora: Inés de cuevas



En una jaula había un loro bien discreto y muy cortés. Es probable que ese loro no hablara más que en inglés...


¿Quieres que te lo cuente otra vez... ?


LA PRINCESITA HUECA  

/Autora: Inés de cuevas

 

Existió en el siglo pasado una princesita a quien le llamaban “Hueca”, y la pobre
era tan hueca, pero tan hueca, que tenía un hueco en los pies...

¿Quieres que te lo cuente otra vez?

 



EL PERRO DE LA COLITA AL REVES
 /Autora: Inés de cuevas
 
Una niña y un niñito querían un perro bonito que no fuera Pekinés,
y les compraron un perro con la colita al revés...


¿Quieres que te lo cuente otra vez?




LA CERBATANA Y EL CIEMPIÉS  
/Autora: Inés de cuevas


La semana pasada una cerbatana iba de paseo por un camino. A mitad del camino, se encontró con el ciempiés y, quedó como el cuento aquél: ”¿tú me ves o no me ves?” de tanto contar los pies...

¿Quieres que te o cuente otra vez?



PARA
DECIR SEGUIDO AGUANTANDO
LA RESPIRACIÓN
HASTA EL FINAL

LA VIEJECITA
/Autora: Inés de cuevas
 
En el pasadizo
del Puente del Norte
está una viejita
con toda su corte
 
Tiene cuadraditos
panzudos, altotes.
 
También menuditos
redondos, Juanotes
 
Los más chiquiticos
flaquitos, flaquitos
 
Los más grandototes
gordotes, gordotes
 
Los más boniticos
negritos, negritos
 
Los más feototes
blancotes, blancotes
 
Los más enfermitos
listitos, listitos
 
Los más sanototes
bobotes, bobotes.
 
En el pasadizo del Puente del Norte
está una viejita con toda su corte.


POR LOS SENDERITOS
/Autora: Inés de cuevas


Tan talàn talàn
Tin tilín tilín
Pon pin
 
Por los senderitos hechos de aserrín
anda cuesta abajo el Señor Pepìn
 
lleva en la solapa
un talàn talàn
y en su bolsillo
el tilín tilín
 
Por los senderitos hechos de aserrín
se llega a la casa de Don Serafín
que tiene en la puerta un talàn talàn
y arriba, en el patio
su tilín tilín
 
Por los senderitos hechos de aserrín
se toca el talàn
se baila el tilín
 
Tan talàn talàn
Tin tilín tilín
Pon pin.



TE CUENTO QUE....
/Autora: Inés de cuevas

Por una calle calle calleja
salta una tara, corre una vieja
 
en un portón portón portejo
cantaba un grillo, bailaba un viejo
 
en una caja caja careja
vivía un enano sin pies ni orejas
 
hasta una nube nube nubera
sube un zancudo por escalera
 
y en los lugares donde hay festines
las pulgas bailan en escarpines.







ANUNCIO SOCIAL
SIN INVITACIÓN


LA BODA DE LAS HORMIGAS

/Autora: Inés de cuevas

El día de Santa Clara  
la boda celebrarán
dos hormigas que se quieren
y comen del mismo pan.
 
En la puerta de la iglesia
su anuncio sujetarán
con letras hechas de migas
y una rúbrica especial.

 
¡ATENCIÓN!

CARTEL QUE DEBEN LEER LOS HABITANTES
DEL PUEBLO DE LAS HORMIGAS:

“Si ven a las hormigas como en procesión
es porque se acercan a la recepción.
 
¡Ábranles la puerta! ¡Déjenlas pasar!
Que bailen y bailen, el vals
sin parar
 
Que llenen sus panzas de todo el manjar
Que coman y beban hasta reventar
 
Y que en sus fiambreras les quepa
-además-
las frutas y postres para merendar.
 
Que guarden pa' “pola”
-como provisión-
la torta de bodas y el rico turrón”
 
ADVERTENCIA:

(Si ven  las hormigas, borrachas de son,
es porque regresan de la recepción).
 







SONSONETEANDO



CHISMES CHISMEROS
 
 /Autora: Inés de cuevas


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que a la sifrina
de aquella esquina
la zapatilla
se le rompió.


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que Luis Mariano
el hombre enano
de comer tanto
se reventó.


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que Don Dionisio
en el edificio
atrapó a un fantasma
y se desmayó.


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que Antonieta
en su bicicleta
con una hormiga
fue que chocó.


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que en el pantano
había un gusano
sin camiseta
y con pantalón.


¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que en una fiesta
hizo la siesta
un borrachito, y se vomitó.

¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que un ratoncito
saltó de un brinco
y entre la sopa
aterrizó.



¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que en la cocina
la gata Nina
tiene su cama
junto al fogón.



¿Lo callas tú y lo digo yo?


Que un gallo fino
a Don Serafino
su ki-ki-ri-ki
le regaló.



¿Lo callas tú y lo digo yo?



Que te has cansado
de sonsonetes...
¿lo dices tú
y lo callo yo?






LAS MENTIRAS DEL PREGÓN
/Autora: Inés de cuevas
 
Los zapatos del zapatero
no tienen suela
ni son de cuero


son son
son son


de hojalata y doble cartón.


Los pasteles del pastelero
no son de harina
ni tienen huevo

son son
son son


de piojos fritos con cigarrón.


Los helados del heladero
no tienen crema ni caramelo


son son
son son


de cebollina con cilantrón.



Los zapatos del zapatero
Los pasteles del pastelero
Los helados del heladero


son son
son son


puras mentiras de este pregón.


PERIQUE

/Autora: Inés de cuevas
 
Pericán, can, can
Las ollitas del sultán
-que no sabe cocinar-
se quemaron por delante
se quemaron por detrás.



Periquén, quen, quen
Al vaivén, al vaivén
que se casa y no se casa
la viudita del laurel.



Periquín, quin, quin
A la niña de Martín
la sacaron del colegio
porque sólo iba a dormir.



Pericón, con, con
Las costillas de un lechón
se las dieron a unos frailes
pa' que hicieran chicharrón.



Pericún, cun, cun
Si te vas para Cancún
tráete un sombrero nuevo
en la caja del betún.
 


LA NUBE DISTRAÍDA
/Autora: Inés de cuevas

 
Dile a esa nube que corra... orra
la lluvia la va a alcanzar... zar
perdió anoche su paraguas... aguas
y no sabe dónde está... ta.


-¿Dónde guardaría el paraguas... aguas
la Señora Celofán... fan?.


-En la brisa que hace ronda... onda
con las hojas, al pasar... sar


En el arco de colores... ores


En el río... ío


En la mar... ar


-¿Dónde, dónde habrá guardado... ado
la Señora Celofán... fan
su paraguas de gotitas... titas
su paraguas de cristal... tal?.


No sabemos en qué estrella... ella
-Doña Nube Celofán- ... fan
colgó anoche su paraguas... aguas


¡Nadie sabe dónde está! ... ta.


 
A LOS CHIN CHIN VITOS
/Autora: Inés de cuevas
 
A los chin, a los chin
A los chin, chin, vitos,
en la granja de Alomar
tengo seis animalitos.


Uno come con paleta
sentadito en la silleta


otro come con cuchillo
sentadito en el hombrillo


otro come con cuchara
paradito en la alambrada


otro come con cubierto
en un zaguán siempre abierto



otro come con palillos
y se limpia los colmillos

y, el último, con los dedos
porque son los merenderos.


A los chin, a los chin
a los chin, chin, vitos
En la granja de Alomar
tengo seis animalitos.

LUENGAS TRABAS... DESTRABAS LENGUAS



LA PIEDRA DEL EMPEDRADO

/Autora: Inés de cuevas
 
Pedro encontró una piedra en el empedrado
la piedra que encontró Pedro,
se la dio a Petra de Prato.
Mil piedras con piedra y piedra empiedran el empedrado
donde Pedro le dio a Petra Prato una piedra de empedrado.
 



PAMPLINADAS Y CANTIFLADAS

/Autora: Inés de cuevas

 

 
Una pamplinada dijo Pamplino
Cantinflas dijo una cantinflada
Pamplino y Cantinflas con sus pamplinadas
Cantinflas y Pamplino con sus cantinfladas.



COROTERO
/Autora: Inés de cuevas
 
coro, coro, corotero; coro, coro, corotón
lero, lero Don Sotero; pelotero de ocasión.


CHOCO CHOCO CHOCOLATE

/Autora: Inés de cuevas

 

 
Choco choco  chocalate, no se dice cocholate.
Cocholate nunca digas, cuando pidas chocolate.
 



EL PASTEL DE FEDERICO

/Autora: Inés de cuevas

 

 
Pico rico rico pico el pastel de Federico
Rico pico pico rico cada pastel con mi pico
Pico rico pico y pico las tortitas que yo pico
Con mi pico rico pico en casa de Federico.


DON TORCUATO EL PEROLATO
/Autora: Inés de cuevas

 
Don Torcuato el Perolato tiene tres panes y un cuarto
yo comparto y recomparto cada pan en cuatro cuartos.
Trece cuartos de tres panes con un cuarto
es la suma de los cuartos de Torcuato el Perolato.





EL LLAVERO Y LA LLAVE

/Autora: Inés de cuevas

En el llavero, la llave lleva Lovera al candado,
para no llevar la llave sin el llavero, colgado.
 
 

PUCHERO CIELO LUCERO
/Autora: Inés de cuevas

Puchero lero tetero
tiene lucero cero de cielo
en el tetero de lero
lucero pone un puchero.

¡LANZA TU PREGÓN!



COPLAS  Y RIMAS
/Autora: Inés de cuevas


Si tienes penas de amores
no llores en el jardín
porque se secan las flores
que cultivé para ti.


La burrita de Altagracia
hace tiempo que no ve
le ha crecido la pollina
hasta el centro del corsé.


Por una sortija de oro
un elefante pasó,
como le sobraba espacio
pasaron cuarenta y dos.



El gato Pepín Pela’o
se vuelve todo un mela’o
cuando ve por el teja’o
la gata que vive al la’o.


En la casa de la cabra
un venado se metió
y le quedaron los cachos
como adorno del portón.


Cuando pasé por el patio
me miraste con ardor
y tu amor quedó colgado
de la mata de limón.


En la puerta de la iglesia
con un grillo me topé
estaba ensayando el coro
de la fiesta e’ San José.


Una vieja pizpireta
de mantilla y romantón
se cayó de una silleta
a la hora del sermón.


Un señor medio vireto
de levita y corbatín
resbaló por una cuesta
y perdió su peluquín.

No me quieras más, amor...
Hoy te estoy queriendo tanto
que tus cartas de ilusión
las tiré por el barranco.

Por la puerta de mi casa
un gigante se metió
y una vieja timorata
de la casa lo sacó.



Por la esquina de la plaza
al viento se le enredó
un hilo de telaraña
que del poste lo amarró.


Por el techo de la iglesia
una gata se escapó
y el gatito, enamorado,
del tejado se colgó.


En el patio del palacio
vi bailar a una gallina
con traje largo y sombrero
girando sobre una espina.


Por el techo
por la puerta
por la esquina y en el patio
baila que baila la tuerta
con el cojo Juan Torcuato.






CUENTOS EN VERSO

EL CASORIO DEL MORROCOY Y LA RANA
/Autora: Inés de cuevas

A un morrocoy de río le salió enamoramiento
con una rana del charco donde se devuelve el viento.


El morrocoy presumía que la rana platanera
era joven casadera, por eso la pretendía.


Pero una clara mañana
las comadrejas volvieron con una noticia rara:


-“No propongas a esa rana  promesas de matrimonio,
porque ella tiene su novio en una charca lejana”.


El morrocoy por curioso, emprendió viaje a la charca

y con un sapo mohoso entabló esta amarga charla...


Dijo el sapo al morrocoy:


-“La ranita presumida que te está quitando el sueño
encontró su nuevo dueño y por él da hasta la vida.

Ya le compró la sortija, el ajuar de matrimonio...
Y aunque traigas al demonio perderías, tú, la partida”


Entonces, el morrocoy entre sorprendido y tristón
 le dijo al sapo mohoso:


-“ Casi, casito, ya me casaba con la comadre
 Comadre Rana,
pero vinieron las comadrejas hasta mi cueva
 -muy de mañana-
y me dijeron que la Comadre tenía su novio
junto a la charca.

Como era un novio de piernas locas
que dando un salto trepa una roca,
mejor me olvido de esbeltas ancas...
y hago las pases con mi tortuga de patas blancas”.




ÑA MARIA CASTAÑAS

/Autora: Inés de cuevas



Ña María Castañas tenía diez hijos
-también una tía-
un perro, un gato
y un queso reseco en un garabato
que todas las noches
el ratón mordía y ... lamía el gato.

Una mañanita de azul primavera
a Doña María le dolía una muela.


Salieron el perro, el gato, la tía
y le preguntaron que por qué gemía.


Ña María, decía:

"Me duele una muela
la muela de arriba
la del lado izquierdo
la de la comía"



Y todos los hijos al oír el cuento
fueron de inmediato a casa del dentista
mientras Ña María lloraba y gemía.



Gimoteaba tanto Ña María Castañas
que toda la gente se sumó, enseguida
los hijos, el perro, el gato, la tía
y su vecindario, de frente y en fila,
le daban la vuelta de calle a cocina



¡Pobre Ña María...!
tenía tanto miedo cuando vio al dentista
que del puro susto no pudo decir
cuál era la muela por la que sufría.


Entonces, sus hijos le abrieron la boca
y dentro le vieron una muela rota...


El señor dentista le sacó la muela
y siguió llorando la Doña María
ya que esa no era la que le dolía.


La pobre viejita apenas decía:

"La muela de arriba es la que me duele,
la del lado izquierdo, la de la comía"


Como hay varias muelas
en el lado izquierdo...
las sacaron todas
pues nadie sabía cual de ellas dolía.


¡Ña María Castañas se quedó sin muelas!


Ahora no come
ni carne, ni pollos
ni arepas, ni bollos
ni el queso reseco
de aquel garabato
que el ratón mordía
y ... lamía el gato.
La pobre abuelita
 come ahora bizcochos
-mojados en leche-
 con pan y cuajada
Pues quedó sin muelas en el lado izquierdo
y como en el derecho no tenía nada...
Ña María Castañas
 hoy vive feliz
vendiendo pasteles
y untando los panes
en leches y mieles.












NO ES LO MISMO

DECIR....

/Autora: Inés de cuevas
 
La viejita Doña Aurora
teje y teje a toda hora
sentada en su mecedora
.


El viejito Don José
baila que baila en un pie
cuando le brindan café.

La pequeña María Luisa
casi se muere de risa
cuando su madre está en misa.


Al niño José Miguel
se le salta hasta la hiel
cuando quiere pan con miel
y le ofrecen aguamiel....




QUE DECIR....

Cuando ya nadie la mira
sentada en su mecedor
la viejita Doña Aurora
empieza con su canción
e invita al viejo José
pa' que se tome el café
con la niña María Luisa
mientras termina la misa
porque le salta la hiel
si le dan agua con miel.




TAMPOCO ES LO MISMO, SI DIGO...

/Autora: Inés de cuevas

El perro de Alba Asunción
ladra y ladra en el portón
cuando ve la procesión
que va por el callejón.


El chanchito de Ana Rosa
mira la taza de loza
cuando está muy fea la cosa.


El loro de Don Quiroz
grita ¡¡Auxilio!! – a toda voz-
cuando lo ataca la tos
por comer granos de arroz....


QUE SI DIGO....


Y aunque el perro de Asunción
ladre detrás del portón,
cuando está muy fea la cosa
ella le dice a Ana Rosa:

-Pida auxilio, ¡¡por favor!!
que la gata de Paulina
metida entre la cocina
se come la provisión.





3 comentarios:

  1. Que bello,me encanta como te expresas en la literatura infantil, y gracias por pasar por mi casita, siempre es un deleite para mi pasar por aqui. un abrazo, judith

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  2. Querida Judith, gracias por tu comentario, me motiva tu forma de dicir las cosas. Dios te bendiga. Un gran abrazo.

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  3. Querida Judith, gracias por tu comentario, me motiva tu forma de dicir las cosas. Dios te bendiga. Un gran abrazo.

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